Navidad, Navidad, Dulce Navidad... El 25 de diciembre, la clase de los ``patos´´ (el nombre que tenia nuestra clase, ya que cada una representaba a un animal) representaba el Belén Viviente del colegio. Yo no tenía ganas de hacerlo debido al personaje que me había tocado, la mula, estaba triste, pensaba que eso era algo que debía representar un chico y que yo debía ser la virgen María o el Ángel. Llevaba unos cuernos ridículos y un disfraz de pelo gris, era una mula muy pequeña ya que yo digamos que no era de las mas altas de clase. Al acabar la función, todos saludamos, de la manita y tan felices aunque yo no me podía casi mover, el traje me daba un calor enorme y los cuernos me empezaban a molestar. Tuve mi desgracia, como en casi todo lo que hacía, la malvada Lilliam Stoner me empujo del escenario. Esa niña desde siempre me dio repelús pues pegaba a mis compañeros y siempre me insultaba. Su querido empujoncito me hizo estar 10 dias en el hospital con un pie roto. Direis ¿ tanto tiempo ? Si queridos leyentes, cariños, cielos y amables, me operaron el pie por un ligamento que se me habia movido. La madre de Lilliam la cambio de colegio, pues sabia que cuando yo me recuperara las cosas no serian buenas. Cuando me recuperé, tras meses y meses, pude volver ha hacer mi vida normal, correr, saltar... Las cosas que tienen que hacer los niños para tener una buena infancia ¿no crees?
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